Desde hace varios años, Grecia es uno de los destinos turísticos más populares del mundo. Lo es por su cultura milenaria, que sigue muy viva, la hospitalidad de sus habitantes y su belleza natural, con un mar turquesa templado incluso en primavera.
Pero en los últimos tiempos, el buen nombre de Grecia y su belleza han cobrado importancia. Atenas, su capital, es cada vez más querida y apreciada, y no sólo por los turistas, sino también por los trabajadores inteligentes y por cualquiera que desee cambiar de ciudad durante su estancia en Europa.
Últimamente, sin embargo, hay otro destino en Grecia que está ganando cada vez más popularidad. Un destino precioso, querido y deseado incluso más allá de las fronteras de Europa. Hablamos de Kastoriá.
Kastoriá se encuentra en la parte más septentrional de Grecia, no lejos de la frontera con Macedonia. Es una de las zonas menos frecuentadas por los turistas, y definitivamente fuera de los caminos trillados para cualquiera que esté de vacaciones en el maravilloso mundo griego.
Precisamente por su lejanía, Kastoriá es también un destino muy económico, y merece la pena tenerlo en cuenta para nuestras próximas vacaciones.
Lo que destaca por encima de todo es el patrimonio bizantino de la zona de Kastoriá, con sus numerosas iglesias paleocristianas y algunos lugares de interés realmente excepcionales. Como la imponente iglesia bizantina de Agioi Anargyroi y el maravilloso museo dedicado a la cultura bizantina. Un lugar mágico, Kastoriá, como lo han descrito algunos visitantes ocasionales tan apasionados que escriben largos reportajes sobre ella en Internet.
Por todas estas razones, Kastoriá destaca. Y se convierte en el destino emergente de Grecia. Gracias a la combinación de precios especialmente bajos, novedades turísticas y artísticas y gran riqueza arqueológica. Todas cualidades que hacen de Kastoriá un destino único, y perfecto para nuestras próximas vacaciones.